Cuatro de las mejores playas de Asia 375a19

Sabah, Borneo. La tercera isla más grande del mundo está cubierta de bosques tropicales casi por completo. Con muy poca infraestructura, los paisajes salvajes de este rincón del planeta pueden parecer poco turísticos, lo que los hace más atractivos. Sabah, pequeña región en la costa norte de la isla, está llena de maravillas naturales. Allí se puede observar cómo las crías de los orangutanes flexionan sus músculos en Sepilok y las enormes flores de Rafflesia, las más grandes del mundo, con hasta 110 centímetros de diámetro, en el parque Kinabulu.  

Además, este estado de Malasia tiene una amplia oferta gastronómica culinaria. No dejen de probar el jaruk: jabalí fermentado en bambú con tapai, un vino de arroz picante.

En Sabah está Bunga Raya, una villa que combina la jungla con el encanto colonial. Construida en dos niveles para que cada habitación tenga vistas impactantes, también cuenta con una piscina y una bañera de hidromasaje en el piso superior. Organizan fiestas con paquetes a la medida, que incluyen desde peinados y banquete hasta arreglos florales. Pueden pasar la tarde en la cava de vinos, que tiene unas 4.500 botellas seleccionadas. La capacidad de sus villas es para seis personas. Desde 13.680 dólares por semana.

Islas Mentawai, Indonesia. Es una de las últimas fronteras del país. Esta atractiva cadena de 70 islitas está un poco lejos de la costa occidental de Sumatra. Estuvieron aisladas del exterior hasta el siglo XIX y la cantidad de especies endémicas que posee se pueden comparar con las de Madagascar. Los amantes de la naturaleza van a estar en el paraíso.

Pueden ir a buscar busca de los simpai mentawai , unos graciosos monos peludos; a las ardillas de vientre negro. Sus playas desiertas garantizan una sensación de aislamiento total mientras que los fuertes vientos alisios del océano Índico crean algunas de las olas más notables del planeta, de ahí que el archipiélago está lleno de lugares de surf. 

En Mentawai está Nihi Sumba, exclusiva propiedad en una de las islas menos exploradas de Indonesia. Diversas villas y fincas se sitúan a lo largo de terrenos tropicales que se extienden hasta el océano. Pueden relajarse en el hidromasaje, alternando con chapuzones en sus dos piscinas.Villas para 18 personas desde 60.430 dólares por semana.

Palawan, Filipinas. Este grupo de más de 1.700 islas tiene una gran biodiversidad. El delgado subcontinente se extiende a lo largo de 650 kilómetros, casi hasta Borneo, y tiene mucho que ofrecer, incluidas las ciudades El Nido y Corón, al norte. Sin embargo, sus acantilados de piedra caliza y los bosques tropicales están empezando a atraer multitudes, especialmente de noviembre a mayo.

La mejor manera de apreciar la belleza de esta región es hospedándose en uno de los islotes que la rodean. Estas manchas de piedra caliza, arena y jungla son el hogar de refugios que van desde hoteles en islas privadas hasta cabañas de playa. En los días festivos, la comida se coloca en una mesa larga donde los huéspedes eligen tamiloks (moluscos servidos con limón y vinagre), pata crujiente (cerdo frito) y camarones.

Ariara es la opción más privada y lujosa en Palawan. Esta isla exclusiva está llena de chalets y villas especiales, y  es ideal para organizar una boda o una fiesta de cumpleaños. Pueden viajar con amigos y pasar el día explorando sus 50 hectáreas de jungla, sus 600 metros de playas y sus espectaculares arrecifes de coral. Un yate con tripulación completa (que está incluido en el costo) está disponible si quieren pasear un poco, pero teniendo un bar de cocktails, un instructor de yoga y un masajista a mano. Villas para 18 personas, desde 54.880 dólares por semana.

Mui Ne, Vietnam. Las arenas doradas de Nha Trang han atraído turistas durante años pero, a una hora de la costa, los 16 kilómetros de playa de Mui Ne permanecen fuera del mapa de los desarrolladores. No hay grandes complejos aquí. En cambio atrae a los vietnamitas adinerados que buscan huir de Ho Chi Minh durante el fin de semana y a los que practican kitesurf, atraídos por el viento que sopla entre las hojas de los cocoteros durante seis meses al año.

Anantara es un destino de playa con mucho que ofrecer. Una vez que se cansen de los deportes acuáticos, pueden salir a explorar enormes dunas de arena roja y blanca, a tres kilómetros de la playa, a pie o a bordo de una cuatriciclo. Esta propiedad frente a la playa de dos habitaciones está hecha a la medida para una familia. Ofrece un excelente servicio y tiene un jardín rodeado de palmeras y privado a la playa. El comedor junto a la piscina invita a largas cenas con vistas al atardecer, mientras que un bar bien abastecido mantendrá animada la fiesta. Hasta para seis personas, desde 2.300 dólares por semana.