Pasá las vacaciones de invierno en una rodante (tercera parte) 6u3i5c

De la Puna al fin del mundo y del mar a la montaña, sorteando montes, humedales, sierras y selvas litoraleñas, la Argentina es una suerte de imán para viajeros inquietos. Pero tanta diversidad y distancia, plantea un gran desafío: qué elegir, dónde parar más tiempo, qué dejar de lado… Y siempre abiertos a la sorpresa, que muchas veces suele aportar grandes experiencias.en esta última parte nos vamos bien al sur, a la nieve, para desafiarte a vivir en un motorhome por más de 15 días.   

Nada como la nieve 6d3n2w

Si bien el invierno restringe posibilidades de a rincones de la Patagonia Sur, la clásica visita a Bariloche ofrece la posibilidad de disfrutar la nieve de la Patagonia Norte, sin mayores reparos climáticos. Esta propuesta suma el paso por la costa, regresando por Las Grutas. Para ello, se sale de Buenos Aires por Luján tomando la RN 5 que atraviesa Mercedes, Chivilcoy, Bragado, Pehuajó y Trenque Lauquen, con Santa Rosa (La Pampa) unos 600 km después. Allí el camping municipal tiene parada gratuita frente a la laguna Don Tomás, un predio enorme con verde, juegos y un faro que se mete en el espejo de agua. 

Más al sur 4e5o11

Al sur, sobre la RP 35 y su conexión con la RP 152, la YPF Cruz del Sur cuenta con un amplio espacio de parada y servicios para motorhome. Siguiendo camino, otros 600 km conducen a Villa El Chocón (Neuquén), previo paso por General Roca, donde se comienza a bordear el Río Negro y se atraviesa Neuquén capital y Plottier. Poco después, El Chocón espera con un barrio de casitas listas para la nevada, a la vera del embalsado del río Limay y sus aguas turquesa. Una iglesia, un pequeño bosque de eucaliptus, la feria y el interesante Museo Paleontológico Ernesto Bachmman, alientan la parada. 

Cruzando el dique, camino a los bomberos, el camping local cuenta con baños, duchas y proveeduría, y buen espacio para motorhome. Finalmente, la RP 237 desanda los últimos 360 km hasta Bariloche, cuando las montañas comienzan a mostrar nieves eternas, en especial llegando al desvío con Villa Traful, un pueblito disgregado entre los paredones y su imperdible lago. En menos de una hora, Bariloche aguarda con posibilidades infinitas: la nieve del cerro Catedral, el trekking al cerro Campanario, el teleférico del cerro Otto; las playas Serena, Melipal y Bonita para matear de cara al lago; el centro Cívico, su iglesia; caminatas por el Circuito Chico con cruce a la península de San Pedro, el ingreso a Puerto López o las múltiples navegaciones por el Nahuel Huapi.

Un poco más lejos, el Tronador, el ventisqueo Negro y las cavernas del cerro Leones (Dina Huapi), amplían una lista sin fin. Si bien algunos hacen noche sin pagar en sectores alejados del Circuito Chico y hacia Colonia Suiza, otros coinciden en que los campings son caros pero muy buenos, como el de Los Manzanos, en el Km 3 de Av. Bustillo. 

Ya el regreso a casa es otra invitación a la aventura, con poco más de 600 km cortando la provincia hacia la costa. Para ello, hay que salir a la altura de Dina Huapi por la RP 23. La mayor parte es de asfalto, aunque algunos tramos requieren bajar al ripio (junto al tramo de la ruta cerrada, pero en perfectas condiciones), como en Comallo. Tras cruzar Ingeniero Jacobacci, Los Menucos y Valcheta, se llega a Las Grutas, el balneario de inmensos acantilados donde puede pararse sin problemas. Otros recomiendan El Estacionamiento (Cipolletti 763), un espacio cerrado con todos los servicios. Una opción gratuita es la Shell sobre la RN 3, camino a San Antonio Este, lugar cercano que vale la pena conocer por su playa repleta de caracoles. De allí la misma RN 3 que conduce a Bahía Blanca conecta con las RP 33 de regreso a Buenos Aires.