Stephanie Hayes es una de las pocas personas que ha tenido la oportunidad de ver de primera mano a una orca blanca nadando, y no solo una vez, sino dos veces, e incluso tuvo la fortuna de poder filmarla.
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Stephanie, estudiante de posgrado de biología marina, pudo apreciar a este inusual espécimen cuando se encontraba a bordo del barco Northern Song, que navegaba por las costas de Alaska.
En el primer avistaje se quedó fascinada por el color de esta rara orca, pero no reaccionó a fotografiarla o filmarla. Al día siguiente, ya preparada para el encuentro, la volvió a ver y en esta oportunidad logró filmarla mientras nadaba a la par de otro ejemplar.
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La orca blanca que se puede ver en la filmación fue bautizada como Tl’uk y fue vista cerca de las islas Kuiu y Kupreanof, al oeste de Petersburg, en Alaska. Se estima que el ejemplar tiene unos dos años de edad.
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La particularidad de su color se debe a que la orca es leucística, una condición genética de algunos animales, que le provocan la pérdida de parte de su pigmentación. Según los especialistas, poder ver a una orca blanca es algo verdaderamente inusual. Incluso hay investigadores que se han dedicado a la especie y aun así han podido ver de cerca un ejemplar.
Las orcas suelen sumergirse en el agua durante mucho tiempo y esto hace que sea muy difícil verlas. Sin embargo, el color de Tl’uk permitía distinguirla fácilmente del resto. La última vez que se filmó a una orca blanca fue en Rusia, en 2010.
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